París bien vale una misa

Enrique IV, autor de la frase:

Fue el 25 Julio de 1593 cuando el entonces rey de Navarra Enrique III, pronunciara su tan célebre frase «París bien vale una misa».

Nacido el 13 de diciembre de 1553, hijo de la reina de Navarra Juana de Albret y de Antonio de Borbón duque de Vendome y Borbón, Enrique fue bautizado bajo la religión católicam, pero educado en la religión calvinista.

Durante las guerras de religiones entre la liga católica y los Hugonotes (protestantes), es quien conduce a éstos últimos a varias de sus victorias.
Tras una sucesión de cruentas batallas, de matanzas como la llamada de San Bartolomé en contra de los Hugonotes, de venganzas y asesinatos en la lucha por el reinado de Francia, quiere el destino que en 1589 sea Enrique III de Navarra el legítimo sucesor al trono, hecho que ni la iglesia católica, ni el entonces poderoso Rey de España Felipe II, ni el Papa reconocen, ya que un requisito para ocupar el trono vacante era que el aspirante a éste fuese católico; así que, entonces, son unicamente los seguidores del partido Hugonote quienes lo reconocen como tal. Es el cardenal Carlos de Borbón quien es nombrado finalmente como rey Carlos X de Francia.

Trás una serie de infructuosos intentos por hacerse de la ciudad de París por medio de la fuerza, Enrique de Navarra decide finalmente el 25 de Julio de 1593 abjurar del protestantismo, mencionando la tan famosa frase. Y sí, París bien valía una misa.

One comment

  1. Encantador pasaje de la historia, me gustó!

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