Historia de Roma: Lucio Cornelio Sila Primera Parte

Lucio Cornelio Sila General Político Romano

Lucio Cornelio Sila otro de los políticos-militares que con sus ambiciones fueron enrareciendo la República Romana durante el siglo Iac.

              Lucio Cornelio Sila (o Sulla) nació en Roma en el año 138ac. Si bien pertenecía a la prestigiosa gens Cornelia, de la que provenían los Escipiónes, los Sila eran su rama menos destacada y poco se sabe de su entorno familiar. Aparentemente llevaban una vida bastante humilde para tratarse de patricios aunque su pasar era bueno comparado con los sectores más bajos de la sociedad.

            A pesar de su relativa pobreza contaba con el prestigio y los contactos suficientes como para que en el año 107ac lo nombraran cuestor en la lucha contra Yugurta el Rey Númida. A Cayo Mario, el comandante de las legiones romanas en África, no le cayó en gracia que le impusieran un cuestor patricio y un tanto afeminado que había sido designado por manejos políticos y no por criterios militares. Para sorpresa de todos, Sila demostró ser alguien muy capaz jugando un rol fundamental en la campaña militar.

                   En el año 105ac los cimbrios y teutones amenazaron con invadir la península itálica desde el norte. Mario fue llamado a repeler a los invasores y  designó a Sila como su legatus, que viene a ser su lugarteniente. Los siguientes años debieron significarle un conflicto personal para Sila. Como máximo dirigente de un ejército que debía combatir en Italia o en sus cercanías, Mario era el dueño absoluto de la situación política romana. Fue elegido cónsul cuatro años seguidos, del 104ac al 100ac, puesto desde el cual realizó una política populista que contrastaba con las posiciones conservadoras y aristocratizantes de Cornelio Sila. Sin embargo, Mario era su general, a quien le debía obediencia, si quizás su relación nunca llegó a ser de amistad al menos eran hermanos de armas y quien le había permitido en gran parte cumplir con sus ambiciones político-militares.

                En el 99ac, una ingeniosa maniobra del conservador senado hizo que Mario perdiera buena parte de su apoyo político y debió retirarse de la vida pública. Sila comienza a desarrollar una carrera política por si solo, en el 94ac es nombrado pretor y al año siguiente se hizo cargo del gobierno de Cicilia en la actual Turquía. Al regresar debió enfrentar un juicio por corrupción, en base a denuncias hechas por sus rivales los populares.

               Volvió a combatir en el año 91ac, cuando los aliados itálicos de Roma organizaron un levantamiento armado que estuvo a punto de derrumbar la república romana. Ésta fue la última vez que luchó en las mismas filas que Mario, aunque parece que ambos tenían el mismo grado por lo tanto ya no fue su subordinado.

               La victoria militar sobre la rebelión en el 88ac (que sin embargo Roma le debió otorgar la ciudadanía a toda Italia) le dio un gran prestigio y fue nombrado cónsul ese mismo año, puesto desde el cual se designó comandante de la campaña contra el Rey Mitrídates IV de Ponto.

One comment

  1. Es muy interesante el libro «El Quinto Infierno», de Jorge Ferraro. Es la última biografía publicada acerca de Sila y la primera escrita en castellano.

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