Emperador por escasos tres meses gracias a que sobornó a la guardia pretoriana, Didio Juliano fue protagonista de unos de los episodios más avergonzantes en la historia de Roma.
Marco Didio Severo Juliano nació en Milán, algunos fechan su nacimiento el 30 de Enero del año 133, otros el 2 de Febrero del año 137. Su padre fue uno de los abogados más importantes de su tiempo y el pequeño Marco fue criado en la casa de Domicia Lucilla, la madre del Emperador Marco Aurelio. Semejantes contactos políticos le permitieron hacer una exitosa carrera, fue nombrado Pretor en el año 162, gobernador de Bélgica en el año 170, cónsul sufecto en el 175. Gobernó Iliria en los años 176 y 177, Germania Inferior en 178. Posteriormente debió exiliarse por ser acusado de conspirar contra Cómodo, sin embargo su imagen fue restituida y volvió a ocupar cargos de gobernadores provinciales, en Bitinia, Asia y África.
Tras el asesinato de Pertinax, la guardia pretoriana vendió la condición de Emperador al mejor postor, en uno de los episodios más escandalosos de la historia de Roma. Didio Juliano resultó el ganador de la subasta y el senado fue obligado a nombrarlo oficialmente Emperador. Intentó ganarse el apoyo popular suspendiendo algunas de las medidas tomadas por su predecesor, sin embargo nadie olvidó las bochornosas circunstancias que lo llevaron al poder y rápidamente quedó aislado políticamente.
Tres comandantes de legiones, se levantaron en armas reclamando el imperio para sí, Pescennius Níger, Clodio Albino y Septimio Severo. Una coalición de estos dos últimos marchó hacia Roma. Para el primero de Junio el senado nombró Emperador a Severo. El flamante Emperador, garantizó el perdón de los pretorianos que le entregaran a los responsables de la muerte de Pertinax y se declaró su legítimo sucesor. Al día siguiente Didio Juliano fue asesinado.
