El antes y el después del “Mayo Francés”

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Como ya estaba escrito, no en la Biblia, ni mucho menos, pero si, en los textos “visualizadores” de Marcuse y Sartre, un día la clase obrera y los jóvenes universitarios unieron sus fuerzas para encabezar una impresionante movilización que si bien tuvo sus comienzos en Francia, cobró una gran magnitud y logró extenderse a lo largo y a lo ancho de todo el mundo.

Partiendo de que los objetivos principales no se cumplieron, es necesario remitirse a lo que realmente significó la gran rebelión de 1968, denominada “Mayo Francés”: no solo fue una protesta contra un gobierno y una ideología, sino que remitió principalmente a una revolución social y cultural nunca antes vista hasta ese momento.

En lo que duró la llamada “Semana rabiosa”, (del 3 al 15 de Mayo), los estudiantes protestaron contra las diferencias de clases, y reclamaron por la libertad de amar, el fin de los prejuicios, y la liberación femenina, así como también por la defensa de la ecología y el medio ambiente.

En medio de una inmensa explosión cultural marcharon envueltos en banderas, con pancartas, afiches, y explotando l máximo las cualidades del grafitti, elementos que nunc antes habían sido utilizados con fines de propaganda ideológica hasta ese momento. A pesar del increíble apoyo que recibieron, ya que el 14 de Mayo 10 millones de trabajadores se adhirieron al paro general, el “Mayo Francés” fracasó (en cuanto a los objetivos que se habían planteado desde un principio), y no por la constante represión policial que sufrieron los estudiantes, sino por una traición de la CGT.

De esta maner, y aunque sus objetivos no fueron alcanzados, si se logró cambiar social, y culturalmente a todo el mundo, ya que modificaron la manera de protestar, y utilizaron elementos como publicidades ideológicas, nunca imaginados siquiera, hasta ese momento.

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